Cada vez estamos más acostumbrados a ver inodoros suspendidos, y es que no solo aportan un toque de diseño a cualquier baño, sino que tienen otras ventajas que te explicamos a continuación. ¡Pero lo mejor es que vengas a verlos a nuestra exposición! 

¿Qué ventajas tienen los inodoros suspendidos frente a los convencionales?

Diseño y modernidad de los inodoros suspendidos

Gracias a sus formas elegantes y a que su cisterna está empotrada,  los inodoros suspendidos aportan al espacio un toque de sofisticación. A esto hay que sumarle su aire moderno, que convertirá nuestro cuarto de baño en un espacio vanguardista.

Amplitud visual

Tal y como te adelantábamos, la gran mayoría de los inodoros suspendidos tienen la cisterna empotrada, lo que hace que visualmente ocupen menos espacio, aportando más amplitud a la estancia. Resultan perfectos para baños pequeños en los que cada centímetro cuenta.

Los inodoros suspendidos ocupan menos espacio

Aunque  los inodoros suspendidos no son más anchos que las versiones de pie, miden menos de fondo: van desde 60 a 52 cm. Gracias a esta característica es posible ganar espacio, alrededor de 15 cm.

Estética

El hecho de que la cisterna esté empotrada, no solo nos ayuda a que nuestro cuarto de baño parezca más amplio, también hace que visualmente sea más liviano y limpio. Y es que, los inodoros suspendidos son más discretos que los convencionales, lo que da como resultado estancias más bonitas y elegantes.

Versatilidad de los inodoros suspendidos

Los inodoros suspendidos se adaptan fácilmente a los diferentes tipos de baños, desde los más grandes hasta los más pequeños, y a cualquier estilo decorativo.

Los inodoros suspendidos son regulables en altura

Los inodoros suspendidos se pueden adaptar a la altura que deseemos en función de las necesidades específicas de cada hogar.

Los inodoros suspendidos son más silenciosos

¿Sabías que los inodoros suspendidos apenas suenan cuando la cisterna es usada para su descarga y posterior llenado de agua? Esto se debe a que los ruidos quedan totalmente amortiguados por la pared donde va empotrada la instalación del bastidor, que a su vez aloja la cisterna y el resto del mecanismo. Además, los bastidores vienen equipados con un aislante que reduce al mínimo los ruidos, especialmente molestos durante la noche.

Fácil limpieza

Por último, pero no menos importante, tenemos que hablar de la limpieza. Una de las principales ventajas de los inodoros suspendidos es que se limpian más fácilmente. Al encontrarse suspendidos podemos limpiar mejor todos los rincones del baño, así estará mejor desinfectado y más limpio en menos tiempo.

Si te decides por un inodoro suspendido o un inodoro clásico, en Celestino Viejo contamos con todo lo necesario para la reforma de tu baño, desde los azulejos y pavimentos hasta el mueble de baño o la bañera ¡Ven y pregúntanos!