Aunque algunas cortinas de baño pueden ser preciosas, lo cierto es que estéticamente nos gusta mucho más el efecto de una mampara de baño. Son más limpias, pues retienen mejor el agua y, además, son capaces de ampliar visualmente el espacio.

Mampara cristal fijo de GME División Baños

Mamparas de cristal fijo

Actualmente, las mamparas fijas de cristal son una solución muy usada. Cubren una parte del plato de ducha, dejando espacio por detrás para entrar y salir de la misma. Como ventaja principal, hay que destacar que son más económicas que otras mamparas. Además, estéticamente funcionan muy bien, pues ocupan menos espacio. Hay que decir que este tipo de mamparas se adapta sin problema a cualquier estilo de baño, desde los más minimalistas hasta los más clásicos.

Mampara cristal abatible de Grupo Kassandra

Mamparas de cristal abatible

Esta es otra de las opciones más recurrentes. Esta clase de mamparas cubren toda la superficie del plato de ducha, pero cuentan con una puerta abatible de acceso. Son más estancas, por lo que el agua no pasará en absoluto. Además, al igual que las anteriores, se adaptan a cualquier espacio, pudiendo hacerlas de diferentes medidas.

Mampara cristal corredero de Grupo Kassandra

Mamparas de cristal corredero

Las mamparas abatibles pueden adaptarse a muchos espacios, pero no siempre son la solución. Así, las mamparas correderas son una excelente elección. Son elegantes, funcionales, ligeras y funcionan muy bien en espacios reducidos. Además, la puerta se puede personalizar para poder ajustarla a cualquier estilo decorativo.